Para comprar una casa, podemos aprovechar planes de financiamiento inmobiliario, al cumplir con los requisitos que solicitan las entidades bancarias, que dependen de la política de cada banco y de variables que condicionan las garantías mínimas de la hipoteca.
En primer lugar, hay que contar con ingresos mínimos mensuales netos. Además, el solicitante o solicitantes deben tener estabilidad laboral y financiera, para aprobar el análisis de riesgo del crédito hipotecario.
Los ingresos deben alcanzar para pagar cuotas y cubrir gastos con un porcentaje de endeudamiento entre un 30 a 40%. El interés y el plazo, también influyen en el límite del financiamiento.
Para obtener una hipoteca, deben sumar un mínimo de miles euros mensuales entre los solicitantes del financiamiento. Pero, como máximo aprueban un 80% del total de lo solicitado y es necesario contar con ahorros, al menos un 20% del costo de la casa, para cubrir gastos de compra – venta.
El financiamiento incluye otros gastos como comisiones, seguros, tarjetas y otros servicios que se suman a los intereses a pagar. Hay que prestar atención a las cláusulas relacionadas con el suelo y otros conceptos.
Es recomendable comparar los requisitos y costos hipotecarios de varios bancos antes de negociar, la documentación económica y sobre todo los gastos pueden variar entre las entidades financieras.
Un especialista en productos financieros, tasa cuál es la mejor opción y revisa sí la oferta de venta se cumple en los documentos, un borrador es clave para que el notario revise antes de la firma y oriente sobre posibles dudas sobre el financiamiento.